Estas larvas de cera podrían inspirar nuevas herramientas para degradar los desechos plásticos.
Los humanos producen más de 300 millones de toneladas métricas de plástico cada año. Casi la mitad de eso termina en vertederos, y hasta 12 millones de toneladas métricas contaminan los océanos. Hasta ahora no hay una forma sustentable de deshacerse de él, pero un nuevo estudio sugiere que la respuesta podría estar en el estómago de algunos gusanos hambrientos.
Investigadores en España e Inglaterra descubrieron recientemente que las larvas de la gran polilla de la cera puede degradar de manera eficiente el polietileno, que representa el 40 por ciento de los plásticos. El equipo dejó 100 gusanos de cera en una bolsa comercial de polietileno durante 12 horas, y los gusanos consumieron y degradaron aproximadamente 92 miligramos, o aproximadamente el 3 por ciento. Para confirmar que la masticación de las larvas por sí sola no era responsable de la descomposición del polietileno. Los investigadores molieron algunas larvas en una pasta y la aplicaron en películas de plástico; durante catorce horas, y las películas habían perdido el 13 por ciento de su masa, presumiblemente descompuesta por enzimas que se encontraban en el estómago de los gusanos.
Al inspeccionar las películas plásticas degradadas, el equipo también encontró rastros de etilenglicol, un producto de degradación de polietileno, lo que indica una verdadera degradación. Sus hallazgos fueron publicados a principios de este año en Current Biology.
Jennifer DeBruyn, un microbiólogo de la Universidad de Tennessee, que no participó en el estudio, dice que no es sorprendente que un organismo se desarrolló la capacidad de degradar el polietileno. Pero en comparación con estudios previos, encuentra que la velocidad de la biodegradación es emocionante. El siguiente paso, dice DeBruyn, será identificar la causa de la falla. ¿Es una enzima producida por el mismo gusano o por sus microbios intestinales? Bertocchini está de acuerdo y espera los resultados de su equipo podrían algún día ayudar arnés de la enzima para descomponer plásticos en los vertederos, así como aquellos dispersos por todo el océano. Pero ella imagina usar el químico en algún tipo de proceso industrial, no simplemente “millones de gusanos arrojados sobre el plástico”.
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