Su dueña se quedó atrapada y este ingenioso gato la ayudó a volver al interior.
Las diferencias entre perros y gatos hacen que casi todos piensen que los primeros son compañeros leales, dispuestos a sacrificar todo por sus dueños, mientras que los últimos son perezosos, manipuladores, egoístas que simplemente pretenden preocuparse solo cuando hay algo que quieren y no pueden conseguir ellos mismos Suena bastante polarizante, ¿no? Bueno, el mundo no es solo blanco y negro, y Gabby Tropea de Austin, Texas, tiene la historia para probarlo.
Recientemente, Gabby dejó a su gato Boko en casa, para que pudiera llevar a su hermana Isabelle a la escuela. Cuando ella regresó, sin embargo, hubo un pequeño detalle, ella olvidó sus llaves e Isabelle había cerrado la puerta con seguro.
“Supongo que ninguno de nosotros se dio cuenta por simple costumbre”, dijo Gabby. “Boko me escuchó y comenzó a maullar en la puerta principal y a rascar”.
“Entonces me fui al patio trasero y él lloraba por mí y me senté y seguí enviando videos a Isabelle sobre cómo me había quedado fuera. Sabía que ella iba a estar en casa aproximadamente una hora, así que sólo iba a esperar, pero vi el palo en la puerta y comencé a golpear el vidrio”.
My sister accidentally locked me out of the house so I went to check if the back door was unlocked and this happened pic.twitter.com/2zkjeyFJk5
— Gabby Tropea (@gabbytropea) 18 de febrero de 2019
“Boko comenzó a frotarle la cara, lo que me hizo seguir animándolo a que se metiera con eso”, agregó Gabby. “Luego él empujó hacia abajo y comencé a moverme hacia arriba y ahí fue cuando finalmente lo tiró. Eso fue increíble.”
Todo duró solo unos 10 minutos, pero Gabby logró grabar la culminación de la prueba y su video ya ha acumulado más de 6 millones de visitas en Twitter. “Se podría decir que él entendió lo que estaba diciendo. Realmente me quería de vuelta adentro”.
Entonces, aunque Boko podría no pasar a la historia como el gato más famoso (no olvidemos a Félicette, un felino que fue enviado al espacio por el CNES, la agencia espacial francesa, y Unsinkable Sam, un minino del que se dice que sobrevivió a tres naufragios separados durante la Segunda Guerra Mundial), definitivamente dejó su marca.
Tropea dijo que encontró a Boko bajo un banco en su universidad en septiembre, y desde entonces han sido inseparables. “Tenía una extraña inclinación a dar un paseo a medianoche y me encontré en el campus y escuché que sonaba como una mujer que grita”, dijo. “Resultó ser un gatito de 8 semanas. Estaba visiblemente enfermo y después de unos 30 minutos pude hacer que viniera a mí. Lo llevé al veterinario, tenía una fiebre de 40° C y me dijeron que probablemente habría muerto al final del día siguiente”.
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