Era una gatita callejera, pero muy tierna y fiel. Él la alimentaba todos los días y jamás la olvidará.
Un carnicero de Turquía alimentaba todos los días a una tierna gatita callejera.
Vivía y deambulaba por los alrededores, encantando a todos los vecinos y en especial al protagonista de esta historia. Era su mejor clienta, hasta que la perdió: ella murió, pero era tanto el cariño que le tenía, que la sepultó en una pequeña tumba en su jardín y fabricó una réplica de cartón para que siempre estuviese presente en el local.
Esta linda y emotiva historia se dio a conocer a través de la red social Facebook, cuando un usuario publicó las fotografías y un breve texto.
‘’Este carnicero le daba de comer todos los días a esta gatita callejera, la gatita murió y él hizo una replica en la misma posición en la que se ponía y también le hizo una pequeña tumba’’.
Cerca de 20 mil personas interactuaron con la publicación, todos tocados por la bella historia, algunos rogando por que los gatos fueran eternos. Al parecer esta felina y su mejor amigo son famosos desde hace algún tiempo por su curiosa rutina y el lazo que crearon juntos.
Cuando la gatita dejó el mundo, el hombre decidió honrarla con una réplica exacta hecha de cartón. Jamás podrá olvidarla, ella estaría feliz de saber que la recordarán con tanto cariño.
En su tumba dejó la inscripción ‘’Jade, la gata conocida en todo el mundo, descansa en paz aquí’’, escribió el hombre en su pequeña tumba.