Una madre haría cualquier cosa por sus hijos y la historia de esta gatita es el claro ejemplo.
Toda madre sabe que sería capaz de hacer cualquier cosa con tal de proteger a sus pequeños, aunque eso conllevara perder la vida misma. En el mundo animal tienen claro que para ellos el amor no tiene límites.
La historia de esta madre gata ejemplar ha trascendido los años y aún sigue viva en los corazones de quienes fueron testigos de un acto de valentía y heroísmo sin precedentes.
El 30 de marzo de 1996 hubo un terrible incendio en un garaje abandonado en Brooklyn, Nueva York. En este lugar vivían Scarlett y sus cinco gatitos de cuatro semanas de vida.
Los bomberos acudieron al lugar y lograron acabar con el fuego. Notaron que la madre felina, a pesar de sus quemaduras y ampollas en los ojos y orejas, transportaba a uno a uno a sus gatitos con sumo cuidado y delicadeza. Esto lo hizo cinco veces hasta rescatar a sus cinco bebés.
Las llamas quemaron a Scarlett y le impidieron ver, así que tocando la carita y las narices de sus gatitos, se aseguró de que estuvieran vivos y fuera de peligro. Después de poner a salvo a todos los gatitos, la valiente gata se desplomó inconsciente.
“La misma Scarlett se había quemado severamente en el proceso de sacar a sus gatitos del fuego. La mayoría de su vello facial se había quemado. Sus ojos estaban cerrados con ampollas, sus orejas y patas quemadas, y su abrigo muy chamuscado”, dijo el bombero que lo presenció todo, David Giannelli.
La familia de gatos fue llevada al North Shore Animal League donde sus heridas fueron curadas, por desgracia uno de los pequeños falleció un mes después del accidente.
Luego de tres meses de tratamiento y recuperación, Scarlett y sus gatitos sobrevivientes estaban lo suficientemente bien como para ser adoptados.
Gracias a sus esfuerzos y valentía, Scarlett atrajo la atención internacional, y la clínica recibió más de 7,000 cartas que ofrecían adoptar a Scarlett y sus gatitos. La clínica decidió dividir a los gatitos en dos parejas y fueron entregados para su adopción a residentes de Long Island.
Por su parte, Scarlett fue adoptada por Karen Wellen, una mujer que le brindó mucho amor y cuidado durante más de 12 años, hasta que lamentablemente falleció el 11 de octubre de 2008.
Esta es la historia de una invencible madre que no dudó un solo momento para salvar a sus bebés, arriesgando su propia vida, dando a las madres humanas la mejor de las lecciones y mostrando hasta donde puede llegar el amor de una madre.
