El método fue creado por una pareja y ahora está revolucionando la forma en la que la gente preserva sus alimentos.
Tali Signorile es artista, mientras que Héctor Pereyra es un arquitecto. Juntos, desarrollaron un sistema capaz de conservar la mayoría de los alimentos sin electricidad: Caixa Verde.
La pareja originaria de Argentina, trabajó en el proyecto durante años. Su objetivo era crear un mueble donde fuera posible almacenar alimentos fuera del refrigerador, y de esa manera ahorrar electricidad sin perder su frescura.
De esta investigación surgió la Caixa Verde, una instalación hecho principalmente de madera y vidrio, la cual utiliza arena y agua para mejorar la conservación de huevos, frutas, verduras y frutas. La capacidad de almacenamiento es de alrededor de 20 a 30 kilogramos, los cuales se colocan en módulos adecuados durante un máximo de dos semanas.
La pareja espera que la invención pueda ayudar a reducir el desperdicio de alimentos, haciendo que los objetos sean visibles para los ojos y mejorando su conservación. La reducción de los desechos también se puede sentir en la factura eléctrica, ya que el refrigerador solo puede ser usado para almacenar carnes, lácteos y alimentos preparados.
Para Socialab, la pareja de empresarios dijo que la idea de crear la caja surgió cuando cuestionaron cómo se hacía la conservación de alimentos antes de la existencia del refrigerador. En busca de esta respuesta, llegaron a tratados de conservación de alimentos del siglo XVIII y adaptaron sus conocimientos con el apoyo de la empresa de tecnología agrícola Crop Biotech.
Actualmente las cajas están disponibles para venta en Argentina, a través del sitio web de La Caja Verde. Los precios varían entre $13,900 y $15,900 pesos argentinos, dependiendo del tamaño elegido y las entregas son gratuitas en el país.
