
Su trabajo de parto ‘se detuvo’ y ahora sus gemelos tienen cumpleaños diferentes.
Joanne Reilly es una policía de 32 años de Manchester, Inglaterra quien se apresuró a ir al hospital de su localidad después de que ‘su fuente se rompiera’ a las 24 semanas de embarazada.
Unas horas después, Joanne comenzó su labor de parto junto a su pareja Anthony de 44 años.
La mujer se preparaba para dar a luz a su segundo hijo, sin embargo, ‘no pasó nada’. El personal médico le indicó que permaneciera en reposo estricto en cama en un intento por retrasar el nacimiento del segundo bebé y aumentar sus posibilidades de supervivencia.
Ahora, 19 meses después, los gemelos tienen un vínculo fraternal inquebrantable. A pesar de haber sido prematuros y que Dylan tuvo complicaciones al nacer, ambos tienen una vida saludable y feliz.