La valentía de la mesera, salvó a un pequeño de 11 años.
Esta historia ocurrió en Orlando, Estados Unidos cuando Flavine Carvalho, quien trabaja como mesera en un restaurante llamado Mrs. Potato estaba de turno el 1 de enero del 2021 cuando atendió una mesa en la que estaban dos adultos y dos menores de edad.
Aunque todo estaba aparentemente normal, Flavine notó un comportamiento extraño en uno de los menores, se trataba de un niño de 11 años que no estaba comiendo nada de lo que habían ordenado y que además estaba muy callado y parecía estar afectado por algo.
Ante la situación, Flavine también se dió cuenta que el pequeño presentaba raspones y hematomas en algunas partes de su cuerpo, por lo que de inmediato decidió hacer algo al respecto ya que temía por la seguridad del niño.
Flavine decidió escribir una nota que decía: ‘DO YOU NEED HELP” (¿Necesitas ayuda?) Y se la mostró al pequeño sin que sus padres lo notarán y aunque al principio negó con una señal, el niño continuó mirando fijamente a la mesera, así que ella le insistió y en esa ocasión el niño asintió con la cabeza.
Posteriormente, Flavine contactó al 911 y en una conversación de cinco minutos describió al agente lo que estaba ocurriendo y una patrulla fue enviada al restaurante para investigar el caso.
Una vez que llegaron al restaurante, la policía pudo corroborar que el niño había sufrido de abuso y en posteriores declaraciones contó que su mamá y el padrastro lo maltrataban atándolo con correas a los tobillos y el cuello y lo colgaban boca abajo de una puerta. También había sido esposado, golpeado con una escoba y atado a una plataforma rodante.
Con todas las pruebas del abuso, el padrastro Timothy Wilson y la mamá Kristen Swann fueron arrestados y acusados con los cargos de negligencia infantil y de abuso agravado de menores.
Adicionalmente, el detective de la Policía Erin Lawler se refirió sobre el estado del menor: “Decir abuso es decir algo ligero, fue una tortura lo que este niño ha pasado” y agregó que “El niño tenía todo tipo de hematomas en diferentes etapas, no fue un incidente aislado. Fueron abusos y torturas continuados”.
Después de los acontecimientos, la mesera Flavine Carvalho recibió un importante mensaje de la Policía de Orlando quienes alabaron el coraje que mostró para salvar al niño “Estamos orgullosos de que alguien como ella viva y trabaje en nuestra comunidad”. Además, el jefe de la Policía de Orlando mencionó en una conferencia de prensa que: “Probablemente hubiéramos estado hablando de una posible investigación de homicidio si ella no hubiera intervenido cuando lo hizo”.
Además, miles de personas enviaron mensajes agradeciendo a la joven por su atención a los detalles, por notar los signos de que algo no estaba bien con el pequeño y por la valentía de hacer algo por el bienestar de un desconocido.