Maravilloso momento.
Esta historia comenzó cuando una perrita ciega de raza Cocker Spaniel fue encontrada deambulando por las calles de Los Ángeles y después fue trasladada a Vancouver en Canadá por una organización de rescate de animales llamada West Coast Cocker Rescue.
Posteriormente, la pequeña fue adoptada por Holly y Bart Emmerson quienes estaban en búsqueda de una mascota a quien darle una vida llena de amor en su hogar. La pareja nombró a la perrita Olive y estaban encantados por su personalidad cariñosa y juguetona. Después de un tiempo decidieron consultar con un especialista para analizar su problema ocular ya que Olive estaba ciega por unas cataratas severas que tenía en ambos ojos.
De esta manera, cuando un cirujano ocular examinó a Olive les dio la buena noticia a sus papás que ella podía recuperar la visión a través de una operación. Holly y Bart estaban muy felices de poder ayudar a su perrita y siguieron al pie de la letra los consejos del especialista para que Olive esté preparada para la cirugía.
Tras realizar la operación, el veterinario de Olive les comunicó a sus papás humanos que esta había sido un éxito y después de aproximadamente tres años de haber padecido ceguera, la pequeña Cocker Spaniel había recuperado su visión, lo que significaba que iba a poder ver a sus papás por primera vez desde que la adoptaron.
De inmediato, Holly y Bart regresaron a la clínica veterinaria donde los especialistas les comunicaron que Olive estaba estable y se mostraba muy curiosa por poder ver todo a su alrededor y por supuesto el momento más esperado fue su reacción cuando vio a su familia por primera vez desbordando alegría, asombro y felicidad.
El momento fue muy emotivo para todos ya que cuando las enfermeras sacaron a la perrita para que se acerque a sus papás, Olive no podía contener su felicidad moviendo su colita y abrazando a su familia, como una forma de agradecimiento por lo que acababa de ocurrir. Posteriormente, la familia llevó a Olive a su hogar y en el trayecto en el carro mantenía su asombro de ver todo lo que pasaba a su alrededor y aunque en ciertos momentos se intimidaba y se escondía detrás de Holly, pocos a poco empezó a tener más seguridad.
Lamentablemente, Olive desarrolló glaucoma en sus ojos afectando su visión a las pocas semanas de haberse realizado la operación, por lo que los papás de la pequeña tuvieron que realizarle otra cirugía para que no sienta dolor en los ojos y los tuvieron que extirpar. Aunque este no era el resultado que ellos esperaban, Holly y Bart lo aceptaron y continuaron dando todo el amor posible a su adorada Olive.
Después de un tiempo la pareja se mudó a España donde radican en la actualidad junto a Olive con su hermosa personalidad juguetona y cariñosa de siempre.