Ella es la prueba de que el amor y la nobleza pueden salvar vidas
Aunque muchos hemos escuchado hablar sobre la paradisíaca isla de Bali, en Indonesia, muchos no saben que la isla tiene un grave problema de perros callejeros que deambulan por los pueblos y ciudades.
Y a pesar de que el gobierno realiza grandes esfuerzos para mantener las cosas bajo control y prevenir los brotes de rabia, los refugios y los ciudadanos han decidido involucrarse y tomar en sus propias manos el compromiso de darles la mejor vida posible a los perritos abandonados en las calles.
Gracias a la importante figura de Yudhishthira, un rey que se ascendió al cielo junto a su perro, existe la creencia común entre muchos hindúes de que cuidar o adoptar perros también puede ayudar a abrir el camino al cielo. Un bello ejemplo de esto, es la historia de una perrita Husky encontrada en la calle, adolorida y extremadamente desnutrida, y que fue rescatada por el alma gentil de Rico Soegiarto.
Cuando Rico, de 26 años, se encontró por primera vez con la desamparada perrita en las calles de Denpasar, tenía secciones calvas y sin pelaje y era tan delgada que era posible verle los huesos a través de su piel enferma. A ella no le quedaba mucho tiempo de vida, pero a pesar de su pésima condición, sus tiernos ojos azules aún brillaban y Rico sabía que tenía que darle una segunda oportunidad.
“No sabía qué era pero tenía algo especial”, dijo Rico en una entrevista a Bored Panda. “Se trata de sentimientos y el corazón. La encontré cuando estaba en el camino de regreso a casa del trabajo, ella estaba en el medio de la calle “. Y vaya, que fue una segunda oportunidad.
Después de muchos cuidados, mimos y buena comida, 10 meses después la perrita recuperó la salud y Rico compartió los resultados de la transformación de su querida nueva mascota. El cambio es tan impresionante que casi resulta difícil de creer.
Así fue como la encontró:
Debido al maltrato y abandono, ella tenía muchas zonas calvas, sin rastro alguno del hermoso pelaje que caracteriza a su raza.
La pobre perrita estaba tan desnutrida que parecía un esqueleto.
Su condición no era nada prometedora.
Pero Rico notó que la tierna mirada de sus ojos azules aún brillaba.
Rico sabía que tenía que darle una segunda oportunidad.
Aunque no fue fácil, la pequeña empezó a responder a los cuidados.
Y poco a poco, la vida comenzó a regresar en el semblante de esta perrita.
Su espíritu se recuperó y los rastros de abandono comenzaron a desaparecer.
Hasta que finalmente Rico decidió compartir con el mundo los resultados de la transformación de su querida nueva mascota.
Después de 10 meses de amorosos cuidados, ahora ella es una perrita fuerte y saludable con un pelaje grueso y lustroso que acompaña a sus vibrantes ojos azules.
Ella claramente adora a Rico. “¡Le encanta que la acaricien y come muchas galletas!”
Ahora ella es parte de una familia feliz con Rico, su novia y otros 4 cachorros. ¿Pero cuál fue el nombre que Rico decidió darle a su increíble guerrera?
Ella se llama ‘Hope’, la palabra en inglés para decir esperanza, y vaya que su historia le hace honor a su nombre.
El asombroso cambio en su semblante hacen que muchos no puedan creer que la transformación de Hope sucedió en tan sólo 10 meses, pero ella y Rico son el vivo ejemplo de los enormes cambios que se pueden lograr cuando decidimos involucrarnos, dar amor, adoptar y creer en las segundas oportunidades.
También te puede interesar: Un esquiador olímpico rescató a 90 perros de una granja de carne en Corea