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Personas detienen el tráfico para que una enorme anaconda pueda cruzar la calle de manera segura

Un grupo de jóvenes se unieron para ayudar a la serpiente y asegurarse que no sufriera ningún daño.

Conductores que viajaban diariamente en la carretera interestatal BR-364 en Brasil, se sorprendieron con un asombroso encuentro. Los vehículos se frenaron cuando los pasajeros se encontraron con algo inesperado en medio de la carretera: una serpiente gigante que se extendía unos tres metros. El evento tuvo lugar cerca de la ciudad de Porto Velho y fue filmado por personas que detuvieron sus autos y salieron para ayudar a la serpiente a cruzar la calle de manera segura.




Italo Nascimento Fernandes y su esposa fueron algunas de las personas que viajaban por la carretera este lunes. “Decidimos detener el auto y salir. No hay señales de que los coches esperen para que ella pueda cruzar. He visto serpientes en la carretera antes, y creo que eso es un crimen”, dijo Italo a los medios de comunicación. Luego agregó que muchas personas siguieron su ejemplo y salieron de sus autos también.

Varios videos aparecieron en Facebook de personas que vieron a la serpiente embarcarse en su peligroso viaje a través de la concurrida carretera. A medida que la anaconda se abría paso a través de varios carriles, trepó la barandilla hacia el centro de la carretera y se dirigió a un lugar seguro al otro lado de la calle.




El medio de comunicación brasileño G1 Globo originalmente publicó la historia y conversó con un biólogo Flavio Terassani. El experto les dijo que la edad estimada de la anaconda es de 10 años y que la serpiente probablemente estaba buscando comida o refugio cuando se deslizó hacia la bulliciosa carretera.

Si bien la serpiente gigantesca parece aterradora, las que aparecen en el video no son realmente venenosas. De hecho, no hay informes verificados de una anaconda verde que haya ingerido a un ser humano. Sin embargo, los zoólogos advierten a las personas que tengan cuidado al acercarse al animal, ya que puede atacar cuando se siente amenazado.