Este dispositivo no invasivo permite detectar infecciones de transmisión sexual de forma rápida y a bajo costo.
La clamidia es una de las infecciones de transmisión sexual más frecuentes en los jóvenes mexicanos entre 18 y 30 años, revela el Instituto Mexicano del Seguro Social, y cuyo diagnóstico puede ser invasivo y en ocasiones doloroso porque se requiere una muestra del epitelio del interior de las vías genitales.
La joven veracruzana Ishtar Rizzo Varela diseñó y creó una prueba casera para hombres y mujeres que permite detectar la presencia de enfermedades de transmisión sexual en diez minutos con una simple muestra de orina.
Por este innovador proyecto, Ishtar Rizzo Varela fue distinguida como uno de los Innovadores menores de 35 Latinoamérica 2018 de MIT Technology Review en español.
LIZA es el nombre del dispositivo, que es similar a un examen de embarazo casero que se compra en la farmacia, mide 12 centímetros de base, 8 de alto y 3 de ancho. En la parte de arriba lleva un cono de papel por donde se coloca la orina y por medio de una tira reactiva se sabe si hay rasgos de una enfermedad, por ejemplo, que si se pinta una raya es que no hay infección, si aparecen dos rayas es cuando el resultado es positivo, si la tira no se pinta es que la muestra no funcionó.
A partir del dispositivo, Ishtar Rizzo creó una start up para la producción y comercialización de LIZA, proyecto en el que participan Chrystian Zomoza Gutiérrez y Eduardo Lozano Ontiveros, con quienes integró un equipo científico emprendedor en iLab, una incubadora de alto impacto con sede en Xalapa, Veracruz.
“Como equipo comenzamos con varios proyectos, pero nos enfocamos en este en específico porque lo vimos como una urgencia. Las enfermedades de transmisión sexual es algo de lo que nadie quiere hablar, pero nos involucra y afecta a todos.
Según la OMS, cada año se contagian de clamidia 130 millones de personas en el mundo, una cifra superior a “toda la población de México”, señaló Rizzo al portal del MIT Technology Review en español.
La intención de su creadora es que este dispositivo pueda comprarse en todas las farmacias, tal como se hace con una prueba de embarazo, de tal forma que la persona pueda tener un diagnóstico de forma rápida, indolora y sobre todo, de manera privada.
“El uso de dispositivos personales como LIZA podría eliminar la barrera en el diagnóstico de estas enfermedades, pues ya no es necesario acudir a una clínica a realizar la prueba de clamidia y, en un futuro, probablemente otras enfermedades de similar naturaleza, como gonorrea y sífilis”, añadió.