El tratamiento funciona correctamente y ahora podemos decir que la enfermedad es curable.
El ébola ya no puede ser definida como una enfermedad sin cura. La declaración proviene de Jean-Jacques Muyembe, director general del Instituto Nacional de Investigaciones Biomédicas en la República Democrática del Congo.
Jean-Jacques formó parte de un equipo que realizó dos tratamientos experimentales con nuevos medicamentos. El aumento en la supervivencia del paciente se consideró una victoria en la lucha contra el Ébola y allana el camino para una vacuna que evite la muerte de miles de personas.
Los infectados ahora tienen alrededor del 90% de posibilidades de curación, un impulso bastante favorable después de resultados insatisfactorios con otros dos medicamentos, el medicamento utilizado fue el ZMapp, durante la epidemia de ébola en Sierra Leona, Liberia y Guinea. Sin embargo esta vez, los investigadores eligieron REGN-EB3 y mab114 como medicamento, el cual atacó al virus con anticuerpos. Con esto, neutralizaron su poder de infección en humanos.
“En adelante, ya no diremos que el ébola es incurable” , dijo el profesor Jean-Jacques Muyembe. “Este avance ayudará a preservar miles de vidas”, agregó.
Una vacuna contra el miedo
La alta tasa de curación, según científicos y maestros, ayuda a combatir el miedo de las personas a buscar tratamiento. Muyembe le dijo a The Guardian que muchos vieron morir a sus familiares en los centros de tratamiento del ébola.
“Ahora el 90% de los pacientes pueden ir a los centros y salir completamente curados. Comenzarán a creer y la confianza se extenderá en las comunidades”, dijo.
Anthony Fauci, director del NIAID, dijo que la tasa de mortalidad con ZMapp fue del 49%. Ya con Remdesivir, 53%. REGN-EB3 y mab114 registraron 29% y 34% más, respectivamente.
En las personas tratadas temprano en la enfermedad, los resultados alcanzaron niveles alentadores. La tasa de mortalidad con REGN-EB3 fue del 6% y del 11% con mab114.
“Mientras más aprendamos sobre estos dos tratamientos y cómo pueden funcionar en el servicio de salud pública, más cerca estamos de convertir el Ébola de una enfermedad terrible en algo prevenible y tratable”, dijo el Dr. Jeremy Farrar, director de Wellcome.