Muchas personas padecen reacciones alérgicas graves y este dispositivo hace la cura más fácil de transportar.
AdrenaCard está destinado a ayudar a las personas que son lo suficientemente desafortunadas como para necesitar una inyección de epinefrina para reacciones alérgicas graves, y lo suficientemente humano como para que regularmente se olviden de si ”epi-pen” cuando salen. Este pequeño inyector de epinefrina cabe dentro de una billetera y es mucho más discreto.
La mayoría de las personas con alergias graves han tenido un encuentro con epinefrina. Cuando el cuerpo reacciona a picaduras de abeja, picaduras de insectos u otras alergias extremas, los músculos alrededor de las vías respiratorias y los vasos sanguíneos se tensan, ahogando la respiración de la persona y estrangulando su suministro de sangre. La epinefrina relaja los músculos y permite que la persona vuelva a respirar.
Estas razone son más que suficientes para que cualquiera con reacciones alérgicas graves lleve una ”epipen”, que son unas jeringas del tamaño de un marcatextos que se administra en inyecciones rápidas y fáciles. Desafortunadamente, debido a su tamaño y la poca frecuencia de su uso, muchas personas alérgicas severas no soportan cargarla a todos lados. La tarjeta creada por AdrenaCard está diseñada para facilitar mucho el mantenimiento de los medicamentos y sólo mide 100 milímetros. Esto es 15 milímetros más largo y el doble de grueso que una tarjeta de crédito promedio.
Mientras las personas pueden ir por años sin la necesidad de tratar una picadura de abeja, pocas personas pasan más de unas pocas horas sin necesitar su billetera. Esto significa que la AdrenaCard está destinada a ser algo que una persona alérgica grave siempre tendrá a mano, sin pensarlo conscientemente.
La tarjeta está pasando aún por las pruebas de la FDA, pero si todo sale bien estará en el mercado para finales de 2018.
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