Una civilización mucho más vasta que conocida.
Desde tiempos inmemoriales, los arqueólogos han recorrido la jungla guatemalteca, al estilo de Indiana Jones, buscando entre la densa vegetación, vestigios de lo que fue la civilización maya. Una de las sociedades dominantes de Mesoamérica durante siglos.
Recientemente, se descubrieron decenas de miles de estructuras construidas por la civilización maya; utilizando herramientas de mapeo LIDAR con aviones de alta tecnología. Estructuras de defensa, casas, edificios, campos agrícolas de tamaño industrial e incluso nuevas pirámides, fueron anunciados por la Fundación Patrimonio Cultural y Natural Maya de Guatemala, también conocida como PACUNAM, que ha estado trabajando con el sistema LIDAR y un grupo de arqueólogos europeos y estadounidenses.
”Esto cambia el juego” dijo Thomas Garrison, a NPR. ”Cambia el nivel básico en el que vemos la arqueología maya”.
¿Cómo se encontró?
El sistema LIDAR dispara pulsos rápidos de láser en las superficies, a veces hasta 150,000 pulsos por segundo, y mide cuánto tiempo le toma a esa luz regresar.
Mediante ese proceso se crearon mapas topográficos de géneros. Meses de modelado computarizado permitieron a los investigadores virtualmente quitarle medio millón de acres de jungla que han crecido sobre las ruinas. Lo que queda es una imagen sorprendentemente clara de cómo un maya del siglo X vería el paisaje.
Los científicos utilizaron escaneos similares para desenterrar una red de ciudades antiguas en Angkor, el corazón del imperio Khmer en Camboya, que incluye el famoso Angkor Wat, de acuerdo con un reportaje realizado por el Times.
Un descubrimiento tan sorprendente como humillante
Los descubrimientos fueron un poco vergonzosos, pues de acuerdo con Garrison, ya habían caminado por estas estructuras mayas, incluido un templo que pensaban era una colina.
”Esta fortaleza estaba en nuestra área”, dijo Garrison al Washington Post. ”En 2010, estaba a 45 metros de esta costa, lo que hubiera sido un descubrimiento masivo en aquel año”.
Pensamientos refinados
Según Associated Press, los investigadores ahora dicen que hasta 10 millones de personas pudieron haber vivido en el área conocida como las Tierras Bajas Mayas. Esto equivale a dos o tres veces más de lo que los científicos habían pensado. Y debido a que toda esa gente necesitaba comer; en algunas áreas, se drenó el 95 por ciento de la tierra disponible. Incluidas las áreas que no se cultivaron desde la caída de los mayas.
”Su agricultura era mucho más intensiva y por lo tanto, más sostenible de lo que pensábamos, además cultivaban cada centímetro de tierra”, dijo a la AP Francisco Estrada-Belli, profesor asistente de investigación de la Universidad de Tulane.
Durante el período clásico maya, que se extendía desde el años 250 hasta el 900 dC, la civilización cubría un área dos veces más grande que la Inglaterra medieval, según National Geographic, y estaba mucho más densamente poblada.
”La mayoría de la gente se había sentido cómoda con estimaciones de población de alrededor de 5 millones”. Dijo Estrada-Belli, quien dirige un proyecto arqueológico multidisciplinario en Holmul, Guatemala. ”Con esta nueva información, ya no resulta irracional pensar que había de 10 a 15 millones de personas allí. Incluidas muchas que vivían en zonas pantanosas y bajas que muchos de nosotros considerábamos inhabitables”.
Jungla: impedimento y preservador
Esta y otras fortalezas recientemente descubiertas indican que los mayas pudieron haber estado involucrados en más conflictos, incluso guerras directas, de lo que se creía anteriormente, y en momentos más tempranos de la historia.
Los investigadores también tienen una manera nueva de pensar sobre la jungla: como impedimento y preservador.
Los restos de otras culturas han sido destruidos por generación tras generación de agricultura. Pero después de que los mayas abandonaron su imperio en el 900 AD; la jungla creció sobre campos y estructuras abandonadas.
Los escondió pero también ayudó a conservarlos.
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