Los vasos se pueden plantar y dan paso a una nueva vida.
Los contenedores fueron lanzados por un restaurante en Sao Paulo, Brasil, y se trata de un producto que no sólo cuida del medio ambiente, también lo preserva.
El vaso semi-artesanal se degrada en la naturaleza y está hecho con papel certificado, tanto en su proceso productivo como en las normas alimenticias.
El contenedor se fabrica sin productos tóxicos, incluso la tinta que se usa para impresión es completamente sin tóxicos y es 90% biodegradable. No es sorpresa el por qué es una buena noticia para la naturaleza, a diferencia de los vasos desechables comunes y corrientes que tardan hasta 500 años en desaparecer, éste tarda solo 36 meses.
“Nuestra estimación es que los 300 mil vasos producidos en esa primera muestra pueden dar lugar a 1,2 millones de árboles frutales devueltos a la naturaleza. Estamos con el estudio y el compromiso de diversas áreas de negocio, repensar nuestros procesos y la incorporación de innovaciones que promuevan la sostenibilidad ambiental y la empresa en su conjunto” , dijo André Figueiredo, director creativo y de Marketing Ragazzo.
Una increíble alternativa para acabar con los plásticos de un solo uso y dar paso a opciones que mejoren el planeta.
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