La papa es uno de los alimentos más importantes para el ser humano, pero debes tener cuidado con estos signos.
Por lo general, cuando se compran papas se tiende a almacenarlas por un periodo de tiempo largo, lo cual podría ser muy peligroso.
Cuando las papas pasan mucho tiempo almacenadas, comienza a aumentar el nivel de un compuesto tóxico llamado solanina.
Las patatas son hortalizas de raíz que crecen bajo la tierra. Cuando estas hortalizas de raíz se exponen al aire y a la luz solar, se forman compuestos venenosos llamados glicoalcalaloides. Para evitar cualquier intoxicación alimentaria por patatas, hay ciertos signos que deben observarse.
Señales que te dicen que debes tirar las papas
Debes tener cuidado y prestar mucha atención a estos signos en las papas que indican que están venenosas.
1. Encogimiento de las papas
Después de pasar mucho tiempo en la cocina sin ser preparadas, las papas comienzan a encogerse. Además, forman una capa arrugada y blanda lo cual es señal de que no deben ser cocinadas. Esto se debe a que el contenido de solanina en las patatas ha aumentado y, por lo tanto, puede llegar a ser tóxico para el cuerpo.
2. Brotes en las papas
Cuando las papas no se usan en un par de días, comienzan a crecer brotes. Los brotes tienen altas concentraciones de dos glicoalcaloides venenosos: solanina y chaconina. El brote en las patatas se produce más rápidamente en los productos orgánicos que en los tratados con productos químicos.
La germinación de la patata puede ser de dos tipos. En un tipo de germinación de la patata, estas son firmes cuando los brotes comienzan a desarrollarse. En este caso, las patatas se pueden cocer una vez que se hayan retirado los brotes.
En el segundo tipo de brote, se produce una capa arrugada y blanda en la patata y los brotes crecen en esa sección. En este caso, es mejor deshacerse de ellas, ya sea para utilizarlas en una composta o tirarlas en un bote de basura orgánico.
3. Papas de color verde
La exposición de las papas a la luz favorece a la producción de solanina, un compuesto venenoso que puede ser tóxico para el cuerpo si se consume en grandes cantidades. Cuando las papas están expuestas a la luz, algunas partes pueden tender a volverse de color verde. Estas partes son generalmente altas en solanina.
Cuando las patatas se tornan verdosas, no hay que desperdiciar toda la patata. Puedes picar las partes verdes y usar el resto de la patata para preparar tu plato favorito.
¿Qué sucede si ingieres papas envenenadas?
La dosis tóxica es de 2-5 mg por kg de peso corporal. Los síntomas se manifiestan de 8 a 12 horas después de la ingesta pero también pueden aparecer a los 30 minutos si la concentración de solanina es muy grande. En los niños hay que tener mayor precaución ya que la intoxicación de este tipo es causa frecuente de muerte.
El contenido promedio de glicoalcaloides es de 0,075 mg por gramo de patata. La cantidad de toxinas depende del estado de madurez en el que se encuentre la papa y de los tratamientos que se le apliquen.
Cuando consumes papas envenenadas, generalmente afecta el tracto gastrointestinal. Los efectos sobre el cuerpo se retrasan de 8 a 12 horas. Si las papas envenenadas se consumen en grandes cantidades, entonces puede afectar el sistema nervioso central.
Los síntomas gastrointestinales y neurológicos son comúnmente más notables. Algunos de los síntomas que se pueden experimentar después de consumir papas envenenadas son los siguientes:
Calambres estomacales
Náuseas
Ardor de garganta
Dolor de cabeza
Mareos
Diarrea
Arritmia cardíaca
Alucinaciones
Cambios en la visión
Respiración lenta
Fiebre
Ictericia
Hipotermia
Pérdida de sensibilidad
Pupilas dilatadas
E incluso la muerte
Así que, ten cuidado cuando compres papas. Trata de no almacenarlas en casa durante un período prolongado. Si lo haces, asegúrate de estar atento a estos signos para evitar la intoxicación alimentaria.
Referencias: National Toxicology Program