El objetivo principal es utilizar un empaque que se disuelva por completo y no deje ningún plástico atrás.
Cada vez se notan más cambios ambientales en todo el mundo: algunos usan semillas de aguacate para crear “plásticos” biodegradables, otros envuelven sus productos con hojas de plátano; es evidente que existe un interés creciente en los cambios ambientales en todo el planeta. Con la creciente demanda de productos más sostenibles, las compañías de todo el mundo están haciendo todo lo posible para encontrar las soluciones más ecológicas. Parece que ahora, más que nunca, las personas están comenzando a notar el impacto que nuestras acciones tienen en esta tierra y todos están haciendo todo lo posible por vivir una vida más sostenible.
Durante el último par de años, muchas personas han declarado que les encantaría participar en eventos públicos como el maratón de Londres, pero las cientos de miles de botellas plásticas de agua desechadas son un factor importante a la hora de decidir si quieren o no participar en este tipo de actividades. En 2018, el maratón de Londres usó 920,000 botellas de plástico, y el hecho de que se demande de 450 a incluso 1000 años para que una botella de plástico se disuelva, demuestra que los cambios deben hacerse lo antes posible.
Pero este año el maratón de Londres ha hecho un gran cambio cuando se trata de regalar agua.
Estas bolsas de agua se pueden usar no solo para almacenar agua, sino también para otras bebidas, por ejemplo, la compañía afirma que son muy populares en los festivales para almacenar cócteles y tragos, también puede usarlos para hacer jugo.
Con más de 40,000 personas participando en el evento, hubo una gran necesidad de un cambio cuando se trata del uso del plástico.
La startup con sede en Londres fue creada en 2013 por Rodrigo García González y Pierre Paslier mientras estudiaban Ingeniería de Diseño de Innovación en el Imperial College de Londres y en el Royal College of Art.
Uno de los factores más importantes para crear estas cápsulas comestibles es el hecho de que las algas marinas pueden crecer hasta 1 metro por día y no necesitan agua fresca ni fertilizantes, sino que también contribuyen activamente a la desidificación de los océanos.
El proyecto se ha ampliado recientemente y ahora está utilizando la misma técnica para almacenar salsas también. El equipo también planea crear redes para almacenar frutas y verduras, películas termosellables y sobres para productos no alimenticios como tornillos, clavos o herramientas.