Este helado actúa contra náuseas, pérdida de apetito y contra heridas que aparecen en la boca y dificultan aún más el proceso de alimentación.
Investigadores de la Universidad Federal de Santa Catarina (UFSC) en Brasil, desarrollaron un helado que ayuda a disminuir los efectos colaterales de la quimioterapia en pacientes con cáncer. Funciona como un complemento alimenticio y, para probar la aceptación y analizar los resultados fue servido durante un año a los pacientes del Hospital Universitario. Son tres sabores: fresa, chocolate y limón.
“Fue una sorpresa maravillosa, el helado es delicioso y minimiza los efectos de la quimioterapia”, dijo Carol Gilda Martins, asistente financiera que es paciente de la unidad hospitalaria. Ella tiene un tratamiento para un cáncer linfático.
Pasó por varias sesiones de quimioterapia, fase del tratamiento en que los efectos colaterales son comunes. “La medicación es muy fuerte, así que creo que son inevitables los efectos colaterales, así que tengo mucositis, que es una herida que da en la garganta, que dificulta en la alimentación, a veces afta, una serie de cositas que dan en la boca, lo que me dificulta ingerir alimentos calientes o alimentos muy gruesos “, explica.
Una de las nutricionistas responsables de la investigación es la profesora Raquel Kuerten de Salles, del departamento de Nutrición de la UFSC quien comentó: “Por ser helado, ayuda a anestesiar la cavidad bucal, que es una de las consecuencias del tratamiento, que son las mucositis que tanto dificultan la ingesta alimentaria”.
“También el paciente que está en quimioterapia que tiene una alteración del gusto, el paciente tiene una dificultad para alimentarse, tiene un gusto diferente. El paciente también siente bastante náuseas, a veces hasta que el olor de la comida puede molestar”, señaló la doctora del equipo de Hematólogo del hospital, Giovanna Steffenello.
El helado lleva fruta y otros ingredientes. “Tiene el aceite de oliva desodorizado, la que tiene el suero de proteína aislada, que es una proteína de alto valor biológico, tenemos fibra, no tenemos lactosa ni gluten en el producto”.
El helado fue desarrollado en asociación con una fábrica de Florianópolis, que tardó seis meses en llegar a la fórmula deseada por los nutricionistas.
“Nosotros ya hicimos un helado que estaba muy cerca de lo que les gustaría que hiciéramos. El desafío era: introducir una grasa de mayor valor nutricional que sería el aceite de oliva desodorizado y una gran cantidad de proteína. Y para un helado eso es muy difícil”, dijo el director de desarrollo de productos, Marcelo Baracuhy.
Los pacientes aprueban la novedad. “Es sencillo, es maravilloso, los sabores son todos muy bien escogidos para no dar ni un poco de náusea, y es maravillosa sí, la gente siente un cariño del equipo en haber pensado en eso para nosotros”, dijo uno de los pacientes.
Las personas que han sido tratadas con el helado han notado diferencias y comentan que la recuperación es mejor.