Por primera vez tienen un hogar lleno de amor.
La protagonista de esta historia es Casey Douglas, una joven originaria de Athens, Texas quien desde temprana edad decidió que no tendría hijos biológicos, porque estaba consciente de todas las carencias y problemas que viven millones de infantes y niños en todo el mundo y por esto, prefirió adoptar para poder ayudar a los niños vulnerables.
Aunque Casey y su esposo recibieron constantes críticas por su decisión de adoptar, ellos mantuvieron su postura y cuando Casey tenía 23 años, se inscribieron en un programa para ser parte del sistema de hogares sustitutos y adopción. Después de completar el programa, una asistente social los contactó para contarles sobre el caso de un adolescente que necesitaba urgentemente un hogar y de inmediato, decidieron acogerlo.
De esta manera, Casey y su esposo, recibieron a Randall, un adolescente de 16 años que fue abandonado por su madre biológica, en un hospital cuando era un bebé y aunque después de una semana su abuela lo reclamó y lo crió hasta que tuvo 11 años, ella enfermó y desde entonces Randall pasó por diferentes casas de acogida, sufriendo constantes abusos. Sin embargo, la vida del adolescente cambió por completo al llegar al hogar de Casey, donde finalmente recibió todo el amor que siempre anheló.
Después de un tiempo, cuando Casey tenía 25 años, su esposo y ella adoptaron legalmente a Randall y unos meses después, decidieron adoptar a dos adolescentes más: a Tim de 15 años y a Damon de 13 años, quienes también habían sufrido abusos durante toda su vida.
En una entrevista con el medio Metro UK, Casey mencionó sobre su decisión de adoptarlos: “Sabía que podíamos proporcionar un hogar cariñoso para niños mayores. La necesidad de hogares sustitutos y adoptivos para niños mayores y adolescentes está por las nubes. También quería hacer algo que realmente hiciera una diferencia”.
Finalmente, Casey mencionó en la entrevista que “Muchas personas ven a los padres adoptivos de niños mayores como santos, pero es realmente simple: si tienes corazón para las personas y corazón para el amor, es algo natural. Te sorprenderás de las cosas que puedes soportar y de lo duro que se vuelve y de tus capacidades, sientes que puedes hacer cualquier cosa. Algunos días son caóticos, otros días son divertidos y otros son normales. Me encanta criar a adolescentes. Ha cambiado hasta lo más profundo de mi ser”.