Sus hermosos murales le dan un toque maravilloso a su pueblo.
Anezka (Agnes) Kaspárková es una abuelita de 90 años residente de un pequeño pueblo llamado Louka ubicado en la República Checa y después de jubilarse de su trabajo en agricultura, decidió empezar a pintar como un hobby.
Desde entonces Anezka ha mejorado mucho su técnica y gracias a la inspiración de otra mujer pintora en su pueblo, decidió empezar a decorar las paredes y ventanas de las casas de sus vecinos con un tipo de arte muy característico del sur de la República Checa llamado Moravian.
De esta manera, la abuelita utiliza un tipo de pintura vibrante de color azul para realizar sus hermosos diseños que decoran perfectamente las casas de su pueblito dándole un toque encantador.
Los majestuosos murales de flores de Anezka le dieron reconocimiento internacional, pero ella insiste que lo hace solo por diversión y en entrevistas con medios checos comentó: “Simplemente amo pintar las paredes y quiero ayudar. Soy una artista”.
Sin duda, Anezka es una abuelita muy talentosa dispuesta a compartir su arte con toda la comunidad y con resultados maravillosos como se aprecian a continuación: