Desde hace tiempo, investigadores han tratado de encontrar un sustituto para el cartílago de la rodilla, ahora lo han conseguido.
Desde hace años, la comunidad científica se ha empeñado en encontrar un material artificial que sustituya el cartílago natural de la rodilla. Recientemente, un grupo de investigadores han creado una sustancia biológica sorprendente que combina las propiedades de un cojín suave y una barrera resistente para evitar que las articulaciones de las piernas se dañen.
Investigadores han desarrollado un material que coincide con el cartílago que se encuentra en nuestros cuerpos, y que podría usarse como un reemplazo después de lesiones o en la vejez.
“Nos propusimos hacer el primer hidrogel que tiene las propiedades mecánicas del cartílago”, comenta el químico Ben Wiley de la Universidad de Duke.
Actualmente, millones de personas alrededor del mundo se someten a cirugías bastante invasivas para implantarse reemplazos de rodilla. Estos reemplazos deben sustituirse cada cierta cantidad de tiempo.
Al igual que con otros hidrogeles, los ingredientes principales de este nuevo material son los polímeros que absorben agua. Este nuevo gel tiene un polímeros entrelazado con otro polímero que es menos flexible. Un tercer polímero, hecho de fibras de celulosa, actúa como una malla que mantiene todo unido.
Al momento en que el material se estira, el tercer polímero mantiene el gel intacto, mientras que cuando se aprieta, los primeros dos polímeros se repelen entre sí y se adhieren al agua, por lo que la forma original se puede restaurar.
Esta innovación tiene increíbles cualidades para estirarse y aplastarse, además de mostrar un mejor rendimiento que otros hidrogeles existentes.
“Solo esta combinación de los tres componentes es flexible y rígida y, por lo tanto, fuerte”, dice el científico de materiales Feichen Yang , también de la Universidad de Duke.
Se realizaron pruebas donde el hidrogel se frotó contra el cartílago natural un millón de veces y se demostró que era tan resistente al desgaste como el natural, y más duradero que el cartílago artificial que se usa hoy en las operaciones.
El nuevo material es muy prometedor como una opción para aquellos que han sufrido problemas con sus rodillas. Muy pronto podrían restablecer el funcionamiento de una articulación, sin largos tiempos de recuperación.