Dan atención a cualquier persona que lo necesite.
En la ciudad de Medellín en Colombia se han instalado ‘escuchaderos’, que son espacios como ‘burbujas’ en diferentes estaciones del metro para que cualquier persona pueda recibir atención de un psicólogo sin costo, como una estrategia de salud mental para los ciudadanos.
En una entrevista con el medio Blu Radio, Valentina Henao, profesional de Gestión Social del Metro de Medellín explicó que “los ‘escuchaderos’ son una estrategia integral que tenemos entre el metro, el área metropolitana y la alcaldía de Medellín y lo que buscamos es normalizar las situaciones mentales, normalizar, educar e informar sobre el manejo de emociones, para valorar y proteger la vida y también prevenir el suicidio”.
Adicionalmente, Valentina resaltó que el objetivo es que “cualquier persona que esté pasando por una situación emocional difícil, tenga acceso gratuito a atención especializada a través de los ‘escuchaderos’. Y mencionó que en la mayoría de las ocasiones van personas de manera independiente, pero también parejas o mamás con sus hijos, cuando son temas familiares, y pueden acudir cuantas veces deseen y por el tiempo que deseen, siempre de manera gratuita.
Por otra parte, Valentina mencionó sobre los inicios de esta importante estrategia: “Empezamos el 11 de septiembre que se celebra el día de la prevención del suicidio, ahí lanzamos toda la estrategia que tiene muchas actividades y acciones para valorar la vida que es el objetivo principal, también educar sobre las emociones y normalizar los trastornos mentales”. Desde entonces, los psicólogos de los ‘escuchaderos’ han dado 1823 atenciones a los ciudadanos de Medellín e incluso cuentan con psicólogos que saben lenguaje de señas para ayudar a las personas sordomudas.
De esta manera, los ‘escuchaderos’ físicos del metro, los ‘escuchaderos’ de la atención telefónica y las demás opciones, son parte de una estrategia macro llamada: ¿Cómo va la vida?, un proyecto que busca concientizar a la población en general, para que se ayuden entre todos para saber y aprender a escuchar y reconocer cuando un familiar, colega, amigo o conocido, puede estar pasando por una situación compleja que potencialmente lo puede llevar a pensar a quitarse la vida y requiere de atención urgente.
Finalmente, Valentina mencionó que “la pregunta ¿Cómo va la vida? Es una pregunta empática, es una pregunta solidaria, es el punto de partida para ese diálogo”. Y ratificó que aunque hay estándares, durante las atenciones en los ‘escuchaderos’, no hay un tiempo límite porque cada caso es diferente e incluso dan atención especializada cuando un psicólogo identifica a una persona que está en una situación apremiante.
¡Sin duda una gran iniciativa!