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¿Cuáles son las causas del déficit de atención en adultos?

El TDAH son las siglas de ‘Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad’, un trastorno originado en la infancia
que implica un patrón de déficit de atención, hiperactividad o impulsividad. Y es que el TDAH se ha considerado
durante muchos años un trastorno propio de la infancia y también de la adolescencia, pero lo cierto es que sus síntomas no siempre desaparecen al pasar a la edad adulta. El trastorno puede permanecer en el 50% de los casos, lo cual puede presentar un impacto importante en la calidad de vida de los afectados.
Estudios asociados al trastorno afirman que la prevalencia en adultos puede llegar hasta un porcentaje del 3,4%. Pero,
sin embargo, una afirmación todavía más preocupante es que la mayoría de estos adultos no están diagnosticados.

¿Qué causa este déficit de atención?

Parece haber una causa genética, considerándose que tiene una heredabilidad del 76%.
Normalmente, los adultos que presentan este trastorno lo han tenido primero durante su niñez. Debido a su complejidad, no puede identificarse en una sola causa.

El TDAH se puede tratar con éxito mediante medicamentos, pero también gracias a la modificación del
comportamiento y otras formas de terapia reforzando los patrones de conducta cognitivos desde la niñez. En este caso,
desde Editorial GEU cuentan con ejercicios y lecturas comprensivas para ayudar a ejercitar y desarrollar la capacidad
de atención. Una ayuda extra para abordar este trastorno que, sin duda, se debe trabajar una vez sea diagnosticado.

Por otro lado, el diagnóstico en adultos puede resultar complicado debido a la coexistencia de otras patologías
psiquiátricas (ansiedad, ánimo…). Pero, ¿cuáles son los síntomas del TDAH? Según la Asociación de Psiquiatría
Americana, existen hasta nueve síntomas asociados con este trastorno y los problemas de inatención. Aunque la
mayoría de nosotros podamos sufrir alguna de estos comportamientos y problemas de vez en cuando, las personas que
sufren de TDAH presentan hasta seis de los nueve síntomas; lo que llega a suponer grandes dificultades en su calidad de vida. Estos problemas pueden causar grandes estragos en el colegio, el trabajo, la familia o las relaciones sociales:

  • Dificultades a la hora de prestar atención en el espacio de trabajo.
  • Es difícil poder prestar atención a los detalles o comete un número elevado de errores por descuido; tanto en el
    trabajo diario como en otras tareas.
  • A menudo presenta problemas a la hora de organizar tareas o actividades.
  • Se distrae con suma facilidad.
  • No es capaz de terminar tareas o actividades y es capaz de no terminar las mismas, incluso cuando entiende lo que se espera de él/ella.
  • Olvida las tareas rutinarias.
  • A menudo pospone o evita las tareas o actividades que requieren de una atención extra.
  • Pierde las cosas con facilidad.
  • Parece no escuchar incluso cuando se tiene una conversación con él/ella directamente.

Además del tratamiento farmacológico, también es indispensable contar con un tratamiento psicológico que nos
pueda guiar: la terapia psicoeducativa y cognitivo-conductual se vuelven de suma importancia. Acudir a un profesional
si crees que puede ayudarte a mejorar aspectos de tu vida que puede hacer que te sientas mejor, es sin duda el mejor
complemento para trabajar este trastorno y conseguir que sea más llevadero.