Recibió una recompensa por su integridad.
La protagonista de esta historia es Andrea Lessing, una empleada de una tienda de segunda mano en Oklahoma, Estados Unidos cuyo trabajo es revisar y organizar cada uno de los artículos donados a la tienda para asegurarse que se encuentren en buen estado.
De esta manera, en tan sólo un mes y medio trabajando en la tienda, Andrea aprendió que es muy importante revisar detalladamente los artículos, en especial cuando se trata de ropa para ver si tienen manchas, agujeros o rasgaduras, para posteriormente clasificarlos y ponerlos en las perchas para su venta.
Durante una de sus revisiones, Andrea abrió una de las cajas donadas y al inspeccionar dos abrigos, notó que había algo pesado y aunque inicialmente pensó que se trataban de libros, se sorprendió al ver que en realidad eran varios sobres con billetes de $100 dólares que en total sumaban $42.000 USD.
Adicionalmente, entre los artículos de la caja, Andrea encontró unos papeles que le ayudaron a identificar al dueño del efectivo y tras comunicar a sus jefes sobre el hallazgo del dinero en los abrigos, logró retornar los $42.000 USD a su dueño.
En una entrevista con el medio NBC, Andrea comentó sobre su decisión “tengo una hija, la amo mucho y no se puede poner precio a mi hija. Sé lo que podría poner en riesgo si robaba ese dinero y también creo en el karma. Creo que si haces algo bueno, algo bueno vendrá a tí”.
Posteriormente, Andrea se llevó una enorme sorpresa ya que después de regresar el dinero, el dueño, quien prefirió permanecer en el anonimato, contactó a sus jefes para darle una recompensa de $1.000 USD en agradecimiento por su integridad y honestidad. Andrea quedó muy conmovida, puesto que obtuvo el dinero de manera honesta y mencionó que planea organizar una linda celebración para el cumpleaños de su hija de 6 años que será en julio.