Sin duda estas personas son los héroes del mar.
Ocean Voyages Institute, es una organización sin fines de lucro, que se dedica a la conservación y limpieza de los océanos. Son un equipo de personas que tienen un trabajo fundamental y muy valioso, más aún cuando tenemos encima la amenaza del cambio climático, y sin olvidar también, que producto del Covid-19, la cantidad de plástico que ha llegado a los mares ha aumentado escandalosamente. Por lo que saber que hay gente que le dedica su tiempo a mantener los ecosistemas sanos y limpios, realmente alegra y permite dar cierta tranquilidad ante un incierto futuro medioambiental.
Son muchas las organizaciones que realizan el trabajo que actualmente hacen en Ocean Voyages Institute, pero este equipo hawaiano acaba de destacar y quedar en la historia sobre los otros. Debido a que tras ponerse a limpiar en el Gran Parche de Basura del Océano Pacífico, lograron romper un récord mundial. Que por un lado, les hará sentir muy orgullosos, mientras que por otro lado, es una advertencia y un llamado a preocuparnos más de nuestros desechos. Ya que estos trabajadores por el medio ambiente, lograron retirar más de 100 toneladas de desechos plásticos del mar.
Durante un viaje de 48 días utilizando un sistema especializado de rastreo digital GPS, lograron dar con grandes botes de basura. Los cuales pudieron retirar dando una suma total de 100 toneladas, tras pasar más de un mes en medio del océano trabajando, sin importar el cansancio o el agotamiento mental que produce soportar por tanto tiempo la marea.
El sistema utilizado, Ocean Cleanup, no gozará de tanta fama, pero más aún con este récord mundial, ha demostrado ser el más efectivo hasta la fecha.
Dependiendo de los voluntario en yates y barcos para que ellos etiqueten redes de pesca enredadas a basura con rastreadores satelitales GPS. Para que luego, el Ocean Voyages Institute realice el viaje, acercándose a estos botes etiquetados, lo que generalmente les lleva a dar con trozos aún más grandes de basura.
En este caso, un trozo de plástico visible, era solo la punta del iceberg ya que abajo suyo había mucha más basura, según concluyó la fundadora del equipo de Ocean Voyages Institute, Mary Crowley. Trozos gigantescos de desechos que se acumularon en parte a las corrientes oceánicas, que los arremolinan dentro de un radio de 15 millas. En su primer viaje de 25 días recolectaron 60 toneladas de desechos plásticos. Y dos días después de que dejaron su última carga de 100 toneladas en Honolulu, volvieron a realizar un tercer viaje. Comprometiéndose el equipo a trasladar todos los desechos clasificados a empresas de reciclaje.