La idea es que los pacientes puedan ver que detrás de los trajes de protección hay personas felices.
La pandemia de coronavirus se ha extendido a más de 1 millón y medio de personas según las cifras contabilizadas. Uno de los países que rápidamente se ha colocado al frente de la lista de contagios es Estados Unidos. Y su personal médico ha estado ya unas semanas luchando contra la enfermedad.
A pesar de toda la tristeza y crisis, uno de los encargados de vigilar a los contagiados de COVID-19 en San Diego, Robertino Rodríguez, ideó un plan para hacer menos difícil estos días a sus pacientes en el Hospital Scripps Mercy.
Sabía que la apariencia de los doctores no era nada alentadora para los pacientes, pues al estar todo el tiempo cubiertos de pies a cabeza, era normal que nadie los viera como ‘’personas amigables’’; así que se le ocurrió la maravillosa idea de colocar una fotografía suya laminada donde se les pudiera ver sonriendo.
En las fotografías se les puede ver más sonrientes y de apariencia más amigable.
‘’Ayer me sentí mal por mis pacientes en urgencias cuando entraba en la habitación con la cara cubierta de EPP. Para que mis pacientes puedan ver una sonrisa reconfortante y amable’’. Se lee en su publicación.
Sus compañeros de hospital hicieron lo mismo y se volvió una tendencia para todos los que atienden a los enfermos de coronavirus.
‘’Seguiré usando la insignia hasta que no tenga que usar una máscara. Mis colegas y otros trabajadores de la salud también lo están haciendo y estoy recibiendo fotos de otros trabajadores de la salud de todo el país se inspiraron por mi foto’’. Comenta Robertino.