El niño viajó con su mamá 1287 km para poder abrazar a sus abuelitos.
La pandemia del COVID-19 ha generado una grave crisis sanitaria y económica que además provocó que muchas familias se abstengan de visitar a sus seres queridos, en especial a las personas de tercera edad, por el riesgo de contagio y potencial fallecimiento por esta enfermedad.
Un ejemplo de esto ocurrió con Erica Lusher, una mujer estadounidense que durante más de un año no pudo visitar a sus papás quienes radican en Port Orange en Florida, ya que temía por la salud de ellos. Sin embargo, cuando la crisis sanitaria de Estados Unidos empezó a mejorar en los primeros meses del 2021 y sus padres fueron vacunados, Erica comenzó a planificar un viaje a Florida para poder reencontrarse con ellos.
Después de tomar todas las medidas de bioseguridad, Erica y su pequeño hijo emprendieron un viaje de 1287 kilómetros desde su casa hacia Port Orange para sorprender a sus papás, quienes se encontraban en un restaurante comiendo y no tenían idea del plan de Erica.
Para poder recordar para siempre la reacción de sus padres en el reencuentro, Erica decidió grabar el momento y cuando entró al restaurante donde estaban almorzando sus padres, la mujer saludó a su mamá, quien quedó completamente sorprendida al ver a su amada hija y nieto después de tanto tiempo, al salir del shock la mujer abrazó a Erica y espera con entusiasmo la reacción de su esposo.
Posteriormente, se observa al abuelito sentado y al ver quiénes habían llegado a la mesa, deja de comer de inmediato y abraza fuertemente a su nieto, conmoviéndose casi hasta las lágrimas, por un reencuentro tan inesperado pero que había deseado por mucho tiempo.
Sin duda un momento maravilloso para esta familia.