La pequeña cumplía 12 años y decidió que en lugar de regalos, le den dinero para donarlo al hombre que ayudó a su abuelita.
Esta hermosa historia empezó el 9 de diciembre del 2020, cuando una abuelita estadounidense llamada Evelyn Topper se encontraba en la Cafetería Kamson Coffee y después de comprar unas bebidas para ella y su nieta, guardó su billetera/cartera dentro su abrigo pero sin cerrarlo correctamente y por accidente dejó caer su billetera en algún punto de la cafetería.
Cuando Evelyn llegó a su casa se dio cuenta que su billetera no estaba y se preocupó por lo ocurrido ya que como comentó en una entrevista con NBC “En la pequeña billetera estaba todo… Cada tarjeta de crédito, débito y de salud. Todo lo que tengo. Estaba muy angustiada”.
Posteriormente, ocurrió algo que Evelyn no se esperaba: ¡Recibió una llamada de un hombre que había encontrado su billetera!. Se trataba de Sean Currey, un hombre sin hogar que encontró la billetera dentro de un contenedor de basura en la parte posterior de la cafetería.
Y aunque ya no había nada de efectivo, todavía estaban todas las tarjetas de Evelyn y ante el hallazgo, Sean decidió encontrar una manera para poder retornarla a su dueña, a pesar de que un amigo de él le sugirió que use las tarjetas antes de que sean canceladas, pero el hombre se negó como lo comentó al medio NBC: “Lo hice por tengo corazón y es así como me educaron”.
Posteriormente, Sean contactó a Evelyn quien estaba sorprendida y por supuesto no podía estar más aliviada y agradeció profundamente a Sean por su buena acción.
Sin embargo, las buenas acciones no se quedaron ahí ya que unos días después del acontecimiento, la nieta de Evelyn una niña que cumplía 12 años llamada Mikayla Gounard había decidido que para su cumpleaños, sus amigos y familiares le dieran dinero para donar a una buena causa, en lugar de recibir regalos.
Mikayla pensó que Sean sería la persona perfecta para donar el dinero recaudado por su cumpleaños así que organizó una celebración con distanciamiento social en la que sus amigos y familiares acudieron en sus carros hacia la casa de Mikayla para desearle un feliz cumpleaños y si querían podían contribuir a su recaudación, por lo que decidió colocar una fotografía de Sean junto a una canasta.
Al siguiente día del cumpleaños de Mikayla, ella y su mamá se reunieron con Sean para entregarle un sobre con los cientos de dólares que lograron recaudar, para ayudar al hombre sin hogar y que esperan mejore un poco su calidad de vida.
Esto emocionó profundamente a Sean quien se mostró muy agradecido con la familia y mencionó que no tenía palabras para describir lo importante que era eso para él.