Su impresionante ímpetu lo ha llevado por todo lo alto, rompiendo récords en natación.
Ismail Zulfic es un niño de 10 años originario de Bosnia Herzegovina y aunque nació sin brazos, esto no ha sido un impedimento para que pueda disfrutar de los deportes y gracias a su tenacidad se ha convertido en uno de los mejores en su país natal, conquistando el título de Deportista del Año por el periódico Nezavisne Novine por su increíble desempeño en natación.
Y es que el ímpetu de Ismail le ha permitido obtener más de 40 medallas en su país y en importantes torneos regionales, como en la competencia para personas con capacidades especiales en Croacia en la que con tan sólo 7 años, fue el ganador de la medalla de oro en la carrera de 50 metros espalda, mientras que en el 2018 conquistó en los juegos Belgrade Open International Sports Games con una medalla de oro en la carrera de 50 metros espalda y medalla de bronce en la de 50 metros en estilo libre.
Los logros deportivos de Ismail son una gran inspiración para otros niños con discapacidad quienes lo admiran por su determinación por ser el mejor, ya que a pesar de tener ciertas dificultades, él siempre da todo de sí en sus entrenamientos, que realiza tres veces a la semana en la localidad de Sarajevo y para esto, su papá maneja 150 kilómetros ida y vuelta desde su natal Zenica.
Gracias al arduo entrenamiento con el Spid Club (Sociedad Deportiva para Discapacitados) junto a otros 87 niños, Ismail ha dejado a su país en alto rompiendo récords y ganando muchas competencias y torneos. Y por supuesto es el gran orgullo de su papá Ismet, quien lo apoya en todo y también se maravilla por su ímpetu, como lo comentó en una entrevista con Newsbeezer:
“En los cinco años que lleva entrenando él nunca ha dicho ‘no puedo’ o ‘no lo voy a hacer’…. se que algunas cosas pueden cambiar durante su pubertad. Pero por ahora, a él le gusta ser el primero en todo lo que hace, natación, fútbol, ciclismo”.
Además, Ismet mencionó que su hijo siempre se esfuerza hasta lograr conseguir una medalla y una vez que lo hace, se esmera para romper su propio récord.
Lo más impresionante de Ismail, es que al inicio él le tenía miedo al agua, ya que cuando era más pequeño se cayó a una piscina de goma. Sin embargo, su papá pensó que una buena alternativa para que supere su miedo era llevándolo con personas expertas y fue así como lo llegó al Spid Club dónde conocieron a Amel Kapo, uno de los entrenadores y fundador del club y quien con mucho cuidado le enseñó a Ismail que no tenía que temerle al agua.
Este fue el principio de la increíble historia de Ismail, quien se ha convertido en un referente en todo el mundo, no sólo por ser un deportista impresionante, sino también por haber superado su miedo y su discapacidad.