La resolución fue apoyada por el parlamento, pero aún faltan tramites para su aprobación.
El parlamento de Pakistán aprobó el viernes una resolución en la que se pide que se cuelgue públicamente a los abusadores de niños condenados y violadores.
La resolución no vinculante sigue a una serie de casos de abuso sexual infantil de alto perfil que han provocado indignación y disturbios en todo Pakistán en los últimos años.
Los asesinos y violadores de niños “no solo deberían recibir la pena de muerte colgando, sino que deberían ser ahorcados públicamente”, dijo Ali Muhammad Khan, ministro de asuntos parlamentarios de Pakistán, quien presentó la resolución en la asamblea nacional o cámara baja.
“El Corán nos ordena que ahorquen a un asesino”, agregó Khan.
Aunque la mayoría de los legisladores aprobaron la resolución, la ministra de derechos humanos, Shireen Mazari, enfatizó que no fue patrocinada por el gobierno.
La resolución sobre ahorcamientos públicos fue a través de líneas partidarias y no una resolución patrocinada por el gobierno sino un acto individual. Muchos de nosotros nos oponemos, nuestro MOHR (ministerio de derechos humanos) se opone a esto ”, tuiteó Mazari.
Las organizaciones de derechos humanos han pedido durante mucho tiempo a Pakistán que restablezca una moratoria sobre la pena de muerte, que se levantó después de la masacre de la Escuela Pública del Ejército en Peshawar en 2014 que mató a 151 personas, la mayoría de ellas estudiantes.
En los años posteriores al levantamiento de la moratoria,
Los abusos sexuales a niños son rampantes en Pakistán.
En octubre de 2018, las autoridades ahorcaron a un violador de niños en un caso infame en Kasur, cerca de Lahore, el cual provocó protestas en todo el país.
En ese caso, la víctima de seis años, Zainab Fatima Ameen, había sido atacada por un hombre de 24 años que confesó su violación y asesinato.
Las autoridades de Kasur también descubrieron una red de pedofilia masiva en 2015.
En un escándalo que sacudió el país, al menos 280 niños fueron abusados sexualmente por una pandilla que chantajeó a sus padres al amenazar con filtrar los videos.
Actualmente no hay crímenes castigados con ejecución pública en Pakistán.
Omar Waraich, subdirector de Asia del Sur de Amnistía Internacional, dijo a MailOnline en un comunicado: “Pakistán debería actuar para abolir esta cruel reliquia del pasado, no extender su uso”.
“Los legisladores en Pakistán necesitan ver los hechos: no hay evidencia en ninguna parte del mundo de que la pena capital disuade el crimen más que la prisión, y el espeluznante espectáculo de las ejecuciones públicas no será diferente”, agregó.
‘Las ejecuciones públicas, que afortunadamente ahora son muy raras en el mundo, son un retroceso a una época más cruel. Pakistán debería centrarse en la protección adecuada de los niños y las medidas de prevención del delito ‘.
“Los ahorcamientos públicos son actos de crueldad desmesurada y no tienen cabida en una sociedad que respeta los derechos”, dijo Amnistía en un comunicado anterior.
“No hay evidencia empírica que demuestre que los ahorcamientos públicos son un elemento disuasorio del crimen o para proteger el bienestar psicosocial de los niños”, Sarah Belal, directora ejecutiva de Justice Project Pakistan, un grupo sin fines de lucro que hace campaña contra la pena de muerte, dijo.
En marzo de 2016, Pakistán introdujo una ley que penaliza la agresión sexual contra menores, la pornografía infantil y la trata. Anteriormente, solo los actos de violación y sodomía eran punibles por ley.
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Información de: dailymail.co.uk