Son los mejores amigos.
Esta hermosa historia de amistad surgió cuando un perrito de raza West Highland Terrier llamado Jack, que padecía de un tumor en su columna que le ocasiona problemas de movilización y una zorrita llamada Pumpkin que fue encontrada casi muerta con dos patas rotas, iban a ser sacrificados por sus condiciones de salud, pero afortunadamente llegaron a la vida de la persona correcta: Ana Lapaz-Mendez una veterinaria londinense que se encargó de ayudarlos con sus condiciones médicas y les brindó todo el amor posible para que tengan una vida mejor.
Y es que cuando Ana conoció el caso de Pumpkin decidió rescatarla y aunque no podía hacer nada en cuanto a su ceguera, si logró curarla de sus lesiones. Después de un año de haberla rescatado, la veterinaria se enteró de la condición de Jack, lo acogió e inició un tratamiento para curar su tumor y como su movilidad continuaba afectada, le dió una silla de ruedas especial para ayudarlo a moverse en su casa.
De esta manera, el perrito en silla de ruedas y la zorrita ciega se convirtieron en grandes compañeros y viven juntos en el hogar de Ana en Londres, Reino Unido. Los dos animales se ayudan mutuamente como se ha reflejado en las fotografías y videos que Ana comparte en sus redes sociales, en las que se observa como los dos aman los paseos por la naturaleza y Pumpkin sigue a su hermano reconociendo el sonido de la silla de ruedas y también a través del olfato.
Ana también ha comentado acerca de la linda relación entre los dos, destacando que Jack es como un hermano mayor protector y cuando pasean por el parque y Pumpkin se distrae, su hermano se detiene y la espera pacientemente hasta que ella lo alcanza otra vez. Además, cuando otros perros o gatos se acercan para molestar a la zorrita, Jack siempre se asegura que ella esté bien y los aleja.
En una entrevista con el medio Metro UK, Ana comentó que Jack “Siente la responsabilidad de cuidarla como lo hace un hermano con una hermana”. Adicionalmente, mencionó que los dos se cuidan incluso cuando están en la casa y casi siempre caminan juntos como un perro guía a un humano.
Finalmente, Ana comentó que los dos han desarrollado un vínculo muy especial y también disfrutan jugar con su otro perrito de la casa llamado Croqueta, quien se une a las aventuras de Jack y Pumpkin.