¿Crees tener lo que se necesita para cumplir una meta capaz de cambiar tu vida?
Lexi y Danny lo tenían. Todo comenzó cuando Lexi decidió que era momento de hacer una cambio en su vida y 18 meses más tarde, ha sucedido algo increíble. Se han convertido en un ejemplo a seguir para todos los que quieren hacer cambios significativos en sus vidas. La pareja tiene muchos consejos excelentes sobre cómo ponerse en marcha para volver los sueños realidad.
¿Qué hicieron exactamente para tener un cambio tan drástico? Prepárate para inspirarte con la increíble travesía de Lexi y Danny.
Lexi Reed siempre tuvo problemas con su peso, desde la infancia. Era una persona feliz y extrovertida y no permitía que su peso la afectara. Aunque intentó perder peso varias veces a través de distintos regímenes, siempre volvía a su peso anterior.
A la corta edad de 25 años, Lexi pesaba 392 libras y el peso extra repercutía en su calidad de vida. Hizo lo mejor que pudo por vivir su mejor vida, una vida de alegría y felicidad, pero definitivamente le estaba estorbando para alcanzar sus sueños.
Lexi continuó su travesía de vida y eventualmente conoció al amor de su vida, Danny Reed. Lexi lo describía como su mejor amigo durante 10 años. Danny amaba a Lexi por la persona que era, sin importar su tamaño ni forma.
Mientras que Danny amaba y apoyaba a Lexi en todo, había un problema: él también tenía hábitos alimenticios dañinos y vivía con un estilo de vida poco saludable y sedentario.
Hábitos dañinos
Tanto Danny como Lexi tenían sobrepeso. Danny, quien era sólo un par de años mayor que Lexi, pesaba alrededor de 280 libras. Juntos, la pareja se descontroló con un estilo de vida aún más sedentario y comía comida chatarra todo el tiempo.
Su autocomplacencia era mutua. Juntos, salían a comer a restaurantes para todas sus comidas, incluso pasando horas en bufés de todo lo que puedas comer. Las veces que comían en casa, pedían comida a domicilio. Mientras tanto, todas las libras extra empezaron a afectar su salud.
Lexi admitió que el ciclo de hábitos dañinos empezó en su infancia. “Al crecer, nunca teníamos mucho dinero y mis padres nunca cocinaban. Siempre era más fácil comprar comida procesada que comprar comida saludable…”
Esa tendencia continuó cuando empezó a salir con Danny. Lexi confesó que ambos hacían maratones de televisión mientras comían. “Siempre fui una comedora emocional, y sin importar de qué humor estuviese, la comida siempre estaba ahí para mí,” añadió Lexi.
Limitaciones.
Al tener sobrepeso, Lexi y Danny no podían hacer las cosas que otras personas sí. A pesar de estar en una relación feliz, no podían ir a caminatas románticas, salir en bicicleta o hacer senderismo. Así que sólo les quedaba quedarse en casa, viendo televisión.
Lexi sabía que su problema de peso estaba limitando su vida. Y mientras que era una persona feliz y positiva sobre la vida, sabía que necesitaba cambiar su alimentación. Pero no sabía cómo, ni tenía la motivación necesaria para hacerlo. Hasta que algo lo cambió todo.
El compromiso.
Danny finalmente pidió la mano de Lexi en matrimonio y ella aceptó. “Nunca me vio como mi tamaño, ni me pidió cambiar, ni me hizo sentir como nada más que hermosa,” escribió Lexi en Instagram. Pero encontrar un vestido de novia de su tamaño parecía un reto, ya que, para este punto, pesaba 485 libras (220 kilos).
Lexi publicó en Instagram que no había nada encantador respecto a comprar vestidos de novia pesando 485 libras. “Nadie sabía cómo hacerme sentir como una novia, y no como mi peso. Gracias a Dios tuve suficiente fuerza para saber mi valor, y seguí buscando mi vestido 34W aunque me preguntaba si algún día encontraría uno,” añadió.
Boda.
Eventualmente Lexi encontró el vestido correcto para su hermoso día de bodas. Danny y ella se casaron, pero sus problemas apenas estaban comenzando. Tenían un largo recorrido frente a ellos si querían vivir una vida saludable y feliz juntos.
El matrimonio empezó a traer preguntas sobre tener hijos eventualmente, algo que sería peligroso tanto para Lexi como para el bebé, si llegara a quedar embarazada. Pero ese no era el único sueño que parecía imposible para los recién casados.
Mientras que la posibilidad de que Lexi no pudiese tener hijos probablemente fuese la mayor preocupación de la pareja, incluso alcanzar las metas más pequeñas en su vida parecían fuera de su alcance. Algunas de ellas eran cosas que otras personas daban por sentado, como viajar.
Lexi tenía un sueño de que algún día pudiese visitar el Mundo Mágico de Harry Potter en el parque temático Universal Studios en Orlando. Sin embargo, no sólo era demasiado grande para las atracciones ahí, también era demasiado grande para encajar en un puesto de avión. Florida está muy lejos de su hogar en el estado de Indiana, y tenía que llegar de alguna manera.
Vida de casados.
Un año de matrimonio había pasado rápidamente y nada había cambiado. Aun así, la pareja pasaba su tiempo libre frente a la televisión mientras comían cosas dañinas y muy procesadas. Luego, algo empezó a cambiar.
Se sentía como que las cosas se salieron de control para ella. Lexi sabía instintivamente que algo tenía que cambiar, pero no sabía por dónde comenzar. Sin importar qué, no se rindió. Nunca. Era fuerte. Y no se imaginaba que la llamada al cambio vendría muy casualmente y terminaría cambiando su vida para siempre.
La idea de que necesitaban empezar a tener un mejor estilo de vida, por su propio bien, estuvo muy presente en la vida de Lexi. Es por lo que, en año nuevo del 2016, Lexi decidió comenzar a hacer cambios en su vida, cambios que también beneficiarían su salud.
Como en cualquier matrimonio, Lexi no estaba sola. Afortunadamente, tenía a su esposo a su lado para apoyarla. Aunque al principio no le gustaba la idea en absoluto. Tendría que convencerlo un poco para que se uniera a la promesa de año nuevo saludable de su esposa.
Cambio de actitud.
“Al principio la idea no sonaba muy bien porque siempre era bueno irse a casa, sentarse, comer y no tener que preocuparse por nada,” dijo Danny. Pero siendo el esposo amoroso que era, no podía dejar que Lexi se enfrentara a esa promesa sola.
“Es un año nuevo y algo en lo que trabajar mientras también ayudo a Lexi,” exclamó Danny después de tener un ligero cambio de actitud. Muy dentro de sí, sabía que era lo mejor para ellos respecto a la salud, para él y Lexi.
Al escuchar de la promesa de año nuevo de la pareja, algunos de los amigos de Lexi y Danny quisieron hacer una apuesta con ellos. La pareja hizo un acuerdo de que pasarían un mes con el siguiente par de reglas: “no salir a comer, no beber refresco, no beber alcohol, no hacer trampa y ejercitarse 30 minutos cinco veces a la semana.”
Lexi y Danny estaban dispuestos a cumplir el reto y estaban determinados a probarse a ellos mismos que podían hacerlo — de que tenían el autocontrol necesario para cambiar sus hábitos. Este sólo era el comienzo de un largo viaje a una vida feliz y saludable.
Un cambio de verdad.
“Estábamos hartos de la vida que estábamos viviendo y de todas las cosas que no podíamos hacer juntos como pareja,” dijo Lexi, decidida a asegurarse de que las cosas cambiaran. Estaba cansada de no poder viajar en avión o salir a caminatas románticas con su esposo.
“También temíamos que, si no teníamos nuestra salud bajo control, nunca podríamos comenzar una familia,” añadió Lexi.
Lexi y Danny se unieron a un gimnasio local en su ciudad de Terre Haute, Indiana. Como lo prometió, Lexi fue al gimnasio 30 minutos al día, todos los días. Pero estaba lejos de ser fácil por muchas razones.
Nadie en la pareja tenía un entrenador personal, pero ambos eran personas tenaces que querían cumplir su promesa con sus amigos. Sin embargo, al principio Lexi tuvo problemas para encontrar su régimen de entrenamiento, ya que sufría de un severo dolor en las articulaciones debido a su sobrepeso.
El lugar y el equipo correcto.
Encontrar el gimnasio correcto no fue tan fácil como sonaba. Lexi se sentía cohibida por lo que las demás personas pensaran cuando la vieran en el gimnasio. Eventualmente la pareja consiguió el gimnasio adecuado para ellos, que no estaba tan lleno, e incluso Lexi encontró la máquina de ejercicio correcta.
“Empecé a ir cuando obtuve una prueba gratis y — ya que nunca estaba demasiado lleno, mi máquina estaba mirando hacia la pared (así que no me sentía como si todos me estuviesen mirando) y encontré una máquina llamada CrossRamp que no me lastimaba las articulaciones cuando pesaba 485 libras — me enamoré de ella.”
Nuevos hábitos alimenticios.
Ir al gimnasio una vez al día sólo era la primera parte del esfuerzo de Lexi y Danny hacia un estilo de vida saludable. También tenían que dejar de salir a comer en restaurantes, lo que significaba que tendrían que preparar sus comidas ellos mismos. Descubrieron la mejor manera de cocinar: juntos.
Con el apoyo de cada uno, Lexi y Danny comenzaron a cocinar su propia comida en casa. Pero esta vez, en lugar de pizza congelada, optaron por comida más saludable que los ayudaría con sus metas de pérdida de peso. Pero como todos sabemos, hacer dieta no es fácil.
Para Lexi y Danny, sus nuevos hábitos alimenticios saludables no eran sólo una dieta; eran decisiones en una nueva manera de vivir. Para Lexi, las dietas eran temporales, y ella necesitaba algo a largo plazo, algo a lo que se podía apegar.
Lexi dejó de ver su alimentación saludable como una dieta y encontró su propia manera de volver la transición más fácil para los dos. “Empecé a tomar las comidas que amaba e hice versiones más saludables así que ya no me sentía como que tenía que renunciar a algo o privarme,” declaró Lexi.
Un apoyo fuerte.
Ir al gimnasio y comer saludablemente no es fácil, especialmente si lo haces solo. Pero Lexi tenía el apoyo de su amado esposo, Danny, y viceversa. Juntos, la pareja era fuerte y seguía manteniendo su promesa.
La mejor manera de mantenerte yendo al gimnasio y comiendo saludable era teniendo a alguien ahí para apoyarte en tu travesía. Danny y Lexi se usaban mutuamente como sistema de apoyo. Juntos, se mantuvieron motivados y pronto pasó un mes.
Mientras pasaba el tiempo, Lexi y Danny continuaron yendo al gimnasio y comiendo bien. ¡Pronto se empezaron a ver los resultados! Lexi incluso empezó a tomar clases en el gimnasio y a conocer personas nuevas. Estos nuevos amigos también se convertirían en su sistema de apoyo y la responsabilizarían.
“Amo mis clases de Pulse. Amo bailar con mi música favorita y no sentir que es un ejercicio. Podemos hacer una canción completa de sentadillas y aunque mis piernas estén en llamas, es tan divertido que no me doy cuenta,” dijo Lexi.
Frutos al fin.
Lentamente, el trabajo de Lexi empezó a dar frutos. Rápidamente superó sus miedos de ir al gimnasio, declarando que “si las personas me van a mirar por mi peso, les iba a dar una razón para mirarme, al ser quien trabaje más duro en la habitación.”
Al principio, Lexi estaba perdiendo 20 libras al mes. Luego la pérdida de peso se volvió más difícil. Seguía asistiendo al gimnasio y comiendo saludablemente, contando su ingesta de calorías diarias. Pronto, sus nuevos hábitos se convirtieron en un estilo de vida.
Lexi no era la única teniendo un progreso significativo en su travesía hacia ser saludable. Danny también. Estaba junto a Lexi en cada paso del camino y pronto también pudo ver una diferencia en su salud.
La pareja continuó con su estilo de vida saludable y en sólo 12 meses, Danny había perdido casi 100 libras. Cuando comenzó su travesía, pesaba alrededor de 280 libras, pero logró bajar a tan sólo 190 libras al final del primer año.
Una transformación increíble.
Después de que pasaran 18 meses, la vida de Lexi se veía completamente distinta. La diferencia era sorprendente y estaba muy orgullosa de su recién descubierto estilo de vida y determinación, lo que hacía naturalmente al ir al gimnasio con regularidad y comiendo de manera más saludable. Para mayo del 2018, había bajado unas increíbles 312 libras.
Lexi dice que la primera gran diferencia que notó en su tamaño ocurrió cuando volvió a un restaurante que la pareja frecuentaba antes de comenzar su travesía. Su estómago se solía recostar en la mesa y ahora tenía mucho espacio de sobra. Ella dice que fue un momento de orgullo genuino.
Buscando más apoyo y queriendo compartir su viaje, Lexi creó una cuenta de Instagram en otoño de 2016 para registrar su increíble travesía. Llamó la cuenta “Fat Girl Fed Up” (“Chica Gorda Harta”) y empezó a publicar fotos de ella en el gimnasio diariamente, junto a frases motivacionales. ¡Pronto tuvo muchos seguidores!
Hoy en día, la cuenta de Instagram de Lexi tiene más de 750.000 seguidores. También publica fotos de antes y después que son impresionantes. En dos cortos años se transformó en una persona saludable completamente distinta, mediante trabajo duro y determinación.
La historia de Lexi y Danny se propagó por internet como el fuego y las estaciones de televisión y noticias a nivel nacional empezaron a notarla. ¡Lexi y Danny aparecieron incluso en programas de televisión para ser entrevistados sobre su increíble travesía y los presentaron en un episodio de Rachael Ray sobre cocina y alimentación saludable!
Aunque la pareja no permite que su recién encontrado estrellato se les suba a la cabeza. De hecho, todo lo contrario. Ahora son más humildes que nunca y le agradecen a la atención mediática por ayudarlos a motivarse aún más en su viaje a vivir más saludablemente.
Un final feliz y saludable.
Juntos, Lexi y Danny han perdido más de 400 libras y ambos tienen un nuevo contrato con la vida. La pareja volvió a la playa donde Danny propuso matrimonio años atrás y trotaron por la orilla del mar para celebrar sus recién encontradas vidas.
Todos esos años atrás, cuando Danny le propuso matrimonio a Lexi, ella pesaba casi 500 libras e incluso una caminata corta en la playa hubiese sido suficiente para cansarla y dejarla sin aliento. ¡Pero ya no! “¡Volvimos a esa playa y corrimos por ella!” declaró Lexi.
Ahora que Lexi cabe más que cómoda en un avión, la pareja finalmente viajó. Viajaron a un lugar que Lexi siempre había soñado con ir: al Mundo de Harry Potter en el parque temático Universal Studios. Ahora, tanto Danny como Lexi caben en las atracciones, con espacio de sobra.
La pareja que ya era feliz ahora lo está aún más. Habiendo pasado por su travesía de pérdida de peso juntos, Lexi dice que ella y su esposo nunca se habían sentido tan cercanos y que su relación nunca había estado tan fuerte. ¡Resulta ser que el sistema de compañeros realmente funciona!
Un aplauso a esta pareja tan fuerte y determinada.