Decenas de voluntarios locales transformaron un viejo autobús en esperanza.
Durante el invierno un autobús de dos pisos se transformó en un refugio para personas sin hogar que buscaban protegerse del frío.
Sammy Barcroft y Joanna Vines, del proyecto Rucksack, una iniciativa liderada por la comunidad la cual recolecta donaciones de mochilas con elementos esenciales para las personas en situación de calle; propuso una solución a la crisis de las personas sin hogar.
”Alguien me sugirió en 2016, ‘¿Por qué no consigues un autobús y lo conviertes en un refugio para personas sin hogar?”’, dijo Vines al Metro.
En enero, Vines realizó un post en redes sociales buscando un autobús y recibió tres ofertas. Stagecoach, una compañía de autobuses, ofreció un autobús de dos pisos que iba a ser desechado y por supuesto Vines lo aceptó.
La transformación del móvil tardó ocho meses y costó alrededor de 6,000 euros; los cuales fueron recaudados a través de donaciones y crowdfunding.
Ayuda para todos
Con ayuda de entre 70 y 80 voluntarios, incluidos electricistas locales y plomeros, se unieron para ayudar; además una universidad en Portsmouth ofreció crear literas y una asociación de vivienda local incluso proporcionó una cocina.
El autobús, actualmente estacionado en la iglesia de St Agatha en Portsmouth. Ahora es un refugio con 12 literas, una sala de estar y una cocina. Además una iglesia local administrará el autobús como parte de su Proyecto Robert Dolling; que apoya a las personas sin hogar en el área.
De acuerdo a una publicación realizada por la organización benéfica Shelter, más de 300,000 personas en Gran Bretaña; se registran oficialmente como personas sin hogar o que viven en hogares inadecuados.
Las temperaturas bajo cero en invierno, así como el viento, la lluvia y la nieve, dejan a los que no tienen ningún lugar cálido en situación de riesgo vital.
Este proyecto busca reducir estos riesgos y además brindar un lugar seguro para muchas de estas personas.
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