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Países Bajos se convierte en el primer país sin perros callejeros

En este país europeo ahora todos los perritos tienen un hogar lleno de amor y cuidados. ¿Cómo lo hicieron?

¿Te imaginas que tan feliz sería el mundo sin perros que sufrieran por estar en situación de calle? Países Bajos se ha dedicado a salvarlos y encontrarles a todos un hogar.

El gobierno aplicó un método de recoger, esterilizar, vacunar, identificar y regresar a los perritos para cambiarles el destino y permitirles tener una vida llena de amor y felicidad.



Desde hace siglos, este país ha tenido una gran población de perros. Casi todas las familias tenían un perro como mascota porque la gente lo veía como símbolo de estatus social. Debido a la gran cantidad de perros, se provocó un brote de rabia que causó la muerte de miles de ciudadanos. Por miedo, muchos propietarios comenzaron a abandonar a sus mascotas llenando las calles de perros.

Países Bajos decidió cambiar esta situación y comenzaron a esterilizar y castrar a los perros de manera gratuita, gracias a esto pudieron esterilizar el 70 por ciento de las perras. A su vez, el gobierno aprobó una ley que protegía a los animales y otra ley relacionada con la salud y el bienestar de los animales.



La nueva legislación podía castigar hasta con tres años de prisión a los propietarios de mascotas que no brindaran tratamientos de vacunación adecuados o realizaran algún tipo de abuso contra las mascotas.

Además, el gobierno holandés aumentó los impuestos sobre la compra de perros en tiendas de mascotas, lo cual obligó a las personas a considerar otras formas de tener una mascota y aumentó la posibilidad de adoptar perros callejeros.

Se crearon campañas de concientización para incentivar a la gente a adoptar a cachorros que no tenían hogar. La gente se enamoró de los perritos y más de un millón fueron adoptados y ahora tienen un hogar lleno de amor.



Gracias a estas medidas implementadas por el gobierno y que tuvieron tanta aprobación por parte de los holandeses, cada perrito que vive en este país no solo tiene un techo y todas la comodidades con una familia, sino que también son aceptados en la mayoría de las tiendas, restaurantes y otros establecimientos del país.

Un ejemplo que debería replicarse en más países del mundo.